Fenómeno de Niño global
A diferencia del Niño Costero, el fenómeno del Niño global nace en el corazón del océano Pacífico, es decir, en el centro del mar; por lo tanto, su impacto es mucho mayor.
“El Niño global puede tener efectos en Sudamérica, Norteamérica, en países como Perú, Brasil, Chile, Argentina, México, Estados Unidos. Incluso, puede llegar a otros continentes como África, Australia y Asia. Todo el mundo puede ser afectado por este Niño, de allí su denominación de Niño global”.
El Niño global es un fenómeno que produce el calentamiento de aguas que puede traer el incremento de lluvias, aunque en algunas zonas altoandinas del país puede generar lo contrario, como es la reducción o ausencia de lluvias, como por ejemplo, en Puno, Cusco, Moquegua y Tacna.
La especialista afirma que los efectos de este fenómeno se dejarán sentir de acuerdo con la temporada. “Si ya nos encontramos en las temporadas de lluvias en verano, allí podría impactar más. En otros países dependerá mucho de su comportamiento meteorológico, lluvias o temperaturas locales”.
Kelita Quispe recordó que el Perú ha experimentado Niños globales extraordinarios en los años 1982, 1983, 1997 y 1998. “Así como ocurre dentro de una familia, hay ciertos rasgos del Niño global que se van a mantener en el tiempo. Sin embargo, todos los fenómenos del Niño son diferentes”.
¿Habrá Niño global en 2023?
El Enfen es la entidad responsable de emitir proyecciones meteorológicas, en el aspecto oceanográfico (físico y químico), biológico-marino, biológico-pesquero, de capacitación y socio-económico.
De acuerdo con el más reciente comunicado Enfen (N°7), nuestro país aún no registra un Niño global. “En caso ocurriera, podría iniciarse en junio de este año. Hay alta probabilidad (68 %) de que esté presente en 2024”, explicó la especialista del Senamhi.
Aunque no ocurre a menudo, manifestó que el fenómeno del Niño costero y el fenómeno del Niño global sí pueden darse de forma simultánea. “De presentarse el fenómeno costero y el fenómeno global al mismo tiempo, tendríamos temperaturas altas en la zona costera, lluvias en la sierra norte (como en 2017) y menos lluvias en la sierra sur”.
“El último fenómeno del Niño global fue en el año 1998 y en 2016. A nosotros no nos impactó de forma directa, pero sí hubo disminución de lluvias en la sierra sur en 2017 y 2023. Podría ocurrir nuevamente en 2024. Sin embargo, los registros (de ocurrencia de ambos fenómenos) nos indican que hay una frecuencia más corta, lo que podría ser una evidencia del cambio climático”, indicó.
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